lunes, 5 de diciembre de 2011

6 DE DICIEMBRE ,DIA DE LA CONSTITUCION ESPAÑOLA


                                      MANIFIESTO PSOE DIA DE LA CONSTITUCION
Nuestra Constitución cumple estos días su trigésimo tercer aniversario. El mérito es de los ciudadanos y a ellos expresamos nuestro público reconocimiento.
El PSOE se felicita por estos treinta y tres años de convivencia en libertad y democracia en los que el pueblo español ha sido el protagonista de su propia historia.
Este aniversario se celebra en un momento de traspaso de poderes, expresión de la alternancia política, entre el actual Gobierno de España y quienes están llamados a sucederle, en cumplimiento de la voluntad popular y dentro del funcionamiento normal de las instituciones democráticas.
El PSOE quiere resaltar el ejemplar comportamiento del pueblo español el pasado día veinte de noviembre, con una notable participación electoral en unas elecciones generales celebradas sin incidencia alguna y sin la amenaza coactiva y asesina del terrorismo, lo cual pone de manifiesto, de manera indubitada, la grandeza y el triunfo de la democracia, de la convivencia pacífica y de la Constitución, frente al terror.
En este último año el Parlamento español aprobó, por una gran mayoría fruto del voto favorable de los dos grandes Partidos, una reforma parcial de la Constitución, introduciendo la garantía del principio de “Estabilidad Presupuestaria” en su artículo 135, efectuada desde la legitimidad de las Cortes Generales, dentro del normal funcionamiento de los mecanismos y de las previsiones constitucionales de reforma.
El PSOE quiere resaltar que el principio de estabilidad presupuestaria ya formaba parte de nuestro ordenamiento jurídico, elevándose ahora su rango normativo al nivel Constitucional. Se trata de un principio recogido en nuestros compromisos programáticos y de gobierno, que forma parte del acervo de la socialdemocracia y que supone una expresión de solidaridad intergeneracional y con las generaciones futuras.
La reforma constitucional que acordaron las Cortes Generales, al igual que el camino emprendido por Alemania, Francia, Italia y otros países de la zona euro, en sus respectivos ordenamientos constitucionales, es consecuencia y reflejo del compromiso de España con Europa y con el euro, con la gobernanza económica de Europa, que requiere una armonización de normas y de culturas constitucionales en el ámbito de la sostenibilidad de las finanzas públicas, entre otros aspectos de relevancia económica.
La reunión del próximo Consejo Europeo del día 9 de diciembre supone una cita trascendental. Hoy en la Unión Europea se está gestando un Gobierno económico común, una política económica común, una nueva gobernanza económica e institucional, para dirigir la política fiscal y presupuestaria en la zona euro, que puede pasar por una inminente reforma de los tratados.
Europa requiere acabar con los vestigios de dumping social, presupuestario y fiscal que aún permanecen. Son necesarios compromisos firmes, ciertos, verificables y fiscalizables que deben ser asumidos conjunta y solidariamente. La unidad monetaria de Europa no es suficiente. Es preciso avanzar hacia una auténtica enidad económica, lo que supone unidad presupuestaria y fiscal.
El reto de la política europea es salvar el euro. Para salvar la moneda única, la Unión Europea ha venido contemplando una serie de medidas como la de acudir a la ayuda del Fondo Monetario Internacional y del Banco Central Europeo, además de otras iniciativas como el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera o la compra de bonos por el BCE y otras fórmulas de ayuda a los países que cumplen sus compromisos. Ello requiere garantías de pago, para lo cual, la UE se plantea reformar los tratados recogiendo y estableciendo garantías de estabilidad fiscal.
Además, el pasado once de marzo de este año, los jefes de Estado y de Gobierno de la eurozona acordaron el Pacto del Euro. Uno de los compromisos de dicho pacto es la sostenibilidad de las finanzas públicas. Este acuerdo persigue una mayor coordinación de las políticas económicas para garantizar una unión monetaria más integrada y competitiva y generadora de empleo.
La Unión Europea no avanzará si no lo hacen sus miembros y si ellos no crean las condiciones objetivas políticas, jurídicas, económicas y constitucionales en el seno de cada país.
La reforma constitucional del artículo 135 se anticipa en esa dirección. Con ella, España lanza un mensaje de solvencia y de confianza al mundo.
La reforma del artículo 135, esto es, el refuerzo y la elevación a rango constitucional del principio de “estabilidad presupuestaria” y de la obligación de “priorizar” en la atención al “pago de la deuda pública” de España, aplicando una política económica y presupuestaria que respete los “márgenes” de “Déficit Estructural acordados en la Unión Europea”, obliga a que las leyes y los actos de Gobierno respeten esas previsiones y se sujeten a esos principios, salvo en casos y circunstancias “extraordinarias” y graves “apreciadas por la mayoría absoluta del Congreso de los Diputados”.
Pero todo ello debe ser interpretado y gestionado en el marco de nuestra propia Constitución, es decir, a la luz de la importancia, prevalencia y firmeza normativa de los derechos y deberes fundamentales y de los “Principios Rectores de la Política Social y Económica”, recogidos en el Capítulo III del Título Primero de la Constitución, los cuales “informarán la legislación positiva, la práctica judicial y la actuación de los poderes públicos”.
El PSOE siempre ha considerado que nuestra Constitución es, sobre todo, una gran carta de derechos y deberes, y los llamados “Principios Rectores de la política social y económica”, regulados en los artículos 39 a 52, funcionan como una “Constitución Económica” que no puede ser desconocida por el resto del articulado constitucional, ni por los poderes públicos, que están obligados a promocionarlos y aplicarlos.
Por consiguiente, la necesaria reforma del artículo 135 no supone limitación de derechos, no fue una reforma contra nadie, ni se hizo a costa de la autonomía de la política, ni puede ser interpretada en contra de los derechos y libertades fundamentales, ni puede desconocer el superior rango de unos “principios rectores de la política social y económica”, que según se desprende de nuestra propia Constitución, obligan a los poderes públicos a promover la redistribución de la renta, el pleno empleo, un régimen público de seguridad social, el derecho a las prestaciones y asistencia sociales, la protección de la salud y la sanidad pública, el medio ambiente, una vivienda digna, o pensiones adecuadas, entre otros principios, derechos y actuaciones. Esos valores, derechos fundamentales y principios rectores sociales y económicos, son la columna donde encuentra la Constitución española su mayor firmeza normativa.
Por último, en estas fechas, el PSOE quiere ratificar su compromiso con las personas que han perdido su empleo o tienen grandes dificultades para acceder al mismo. Sin duda alguna, la gran crisis global se ceba en España principalmente en quienes pierden su empleo o no encuentran trabajo. Por eso, hoy el compromiso prioritario es la lucha contra el paro. La Constitución obliga a los poderes públicos a la realización de una política activa a favor de quienes están sufriendo las consecuencias más graves de la peor crisis económica de la historia.
Colocar la lucha contra el desempleo como la gran prioridad de la acción política es un imperativo constitucional acorde con los valores superiores de libertad, justicia e igualdad que nuestra Constitución proclama. Hoy, en la celebración de su 33 aniversario, ese es el gran compromiso de España.


5 comentarios:

Anónimo dijo...

Habla con Zapatero "todos los días"

Mariano Rajoy ha asegurado además que habla "todos los días" con el jefe del Ejecutivo en funciones, José Luis Rodríguez Zapatero, y ha dado por terminadas las reuniones formales para el traspaso de poderes que encargó a la hasta ahora portavoz del Grupo Popular, Soraya Sáenz de Santamaría.

Así lo ha señalado Rajoy en declaraciones en el Congreso, donde ha acudido a la recepción por el Día de la Constitución a la que seguirá un almuerzo en el compartirá mesa y mantel con Zapatero, con el todavía presidente del Congreso, José Bono, y con expresidentes de la Cámara Baja. Rajoy ha confirmado que en los últimos días ha hablado "en numerosas ocasiones" con Zapatero sobre la cumbre europea que tendrá lugar el próximo viernes para consensuar la posición española y que esas conversaciones se han desarrollado "de forma muy satisfactoria".

Preguntado sobre si tendrá finalmente un nuevo encuentro con Zapatero, el líder del PP ha explicado que se convocará una nueva reunión "si hace falta" pero que él está en contacto permanente con el presidente del Gobierno en funciones. "Hablo con él todos los días", ha relatado.

Rajoy ha anunciado que ya han "terminado formalmente" las reuniones para organizar el proceso de traspaso de poderes. A partir de este martes, según ha detallado, el Gobierno va a empezar a remitir al PP toda la documentación que le han requerido para que, una vez se constituya el próximo día 22, el nuevo Gabinete ministerial pueda empezar a trabajar a la "mayor celeridad posible". Sin embargo, una vez más, Rajoy ha rehusado desvelar qué medidas piensa poner en marcha para que España pueda cumplir este año el objetivo de déficit al que se ha comprometido con la Unión Europea. Tras recordar que él será fiel a esos compromisos, se ha limitado a señalar que "las medidas se anunciarán en su día".

Anónimo dijo...

Estos textos tan largos ya los podemos leer en periodicos.....creo que hasta aburre lo mismo.
Los comentarios son para opinar,discutir....pero no para leer fragmentos del ABC o similares.
RUEGO OMITAN TEXTOS COPIA-PEGA,prefiero ni leerlos,sea del color que sea.
gracias

Anónimo dijo...

• Más de una veintena de ex ministros de los Gobiernos de Felipe González y veteranos dirigentes socialistas que tenían previsto reunirse este miércoles para compartir ideas sobre el futuro del partido han decidido suspender su encuentro después de que se haya filtrado a los medios, según han informado a Europa Press varios convocados a esa reunión.
Los invitados a esta cena querían reunirse de manera discreta pero, además, les ha molestado especialmente que se haya vinculado su cita con un intento de crear un gestora que dirija el PSOE hasta el próximo Congreso Federal, algo que, según los consultados, no estaba en sus planes.
"Se trataba de ver cómo podemos contribuir los veteranos, los que ya no tenemos intereses, a dinamizar el partido; de hablar de qué le está pasando al partido, de cómo salir, con qué prioridades" resume una de las personas que iban a asistir a la reunión y que, además, incide en que su intención no era hablar de candidatos a la Secretaría General: "Primero hay que hablar del qué y del cómo, lo último son las personas".
Al final no fueron nadia esto va acabar como el rosario de la aurora,al final se cargaran el partido por que todos quieren poner a los sullos.

Anónimo dijo...

Mientras Angela Merkel y sus socios franceses, holandeses, italianos, españoles, griegos y demás piensan cuáles serán sus siguientes pasos, se puede decir con toda seguridad que el euro no es sólo un problema europeo: es un problema planetario. EEUU, China o Brasil podrían hablar al respecto.

Anónimo dijo...

Rajoy practica la marcha atrás

Juan Manuel Moreno, coordinador de Política Autonómica y Local del PP
anunciaba a primera hora de la mañana a bombo y platillo que Rajoy
ampliaría el plazo en torno a diez años para que las Comunidades
Autónomas pagarán su deuda con el Estado. Menos de seis horas después
Arenas salía al quite y le enmendaba la plana a su compañero espetando
un: “No se ha hablado de ese asunto”.

Rajoy, que tanto criticó a ZP por su “improvisación”, da su primer bandazo
y ni siquiera ha llegado al gobierno.
Sus propios barones víctimas del “depende”: En campaña se
Comprometió a ampliar el plazo para que las CC.AA. pagaran la deuda que
tienen con el Estado y ahora todo “depende del estado de las cuentas”
Rajoy saca de su diccionario palabras como urgencia y exigencia y
sigue agazapado en su despacho sin dar la cara ni explicar sus planes para
mejorar la situación de extrema urgencia a la que se enfrenta España en
Europa.
Dicen que está tomando decisiones, pero ni una palabra a la ciudadanía
ante la que debe rendir cuentas.